Soporte vital pediátrico avanzado

Mayo 2013

 


 

                                                                                                        
Apartado 8...

Reconocimiento y manejo de la bradicardia

Descripción general


En este apartado se trata el reconocimiento y el manejo de la bradicardia (frecuencia cardíaca lenta) en lactantes y niños con pulso palpable.

Objetivos de aprendizaje

 

Después de estudiar este apartado, podrá :

 

Preparativos para el curso
 

Se espera que sepa reconocer los ritmos de la bradicardia y tratar al niño según lo descrito en el algoritmo de bradicardia pediátrica con pulso y mala perfusión.
 

 

Concepto crítico

Bradicardia sintomática y compromiso cardiopulmonar

La bradicardia sintomática es una frecuencia cardíaca más lenta de lo normal para el grupo de edad del niño (normalmente < 60 Ipm) asociada a un  compromiso cardiopulmonar.


El compromiso cardiopulmonar se define como signos de shock (por ejemplo, hipotensión, mala perfusión, estado mental alterado, es decir, menor nivel de conciencia) combinados con insuficiencia o dificultad respiratoria.

 


Definiciones

La bradicardia es una frecuencia cardíaca lenta en comparación con la frecuencia normal para el grupo de edad y nivel de actividad del niño.

 

Véase el Apartado 2, Tabla 2: Frecuencia cardíaca normal (latidos por minuto) por edad.

 

La bradicardia es un signo claro de paro cardíaco inminente en lactantes y niños, especialmente si está asociada a hipotensión, hipoxia y acidosis.

 

Si, a pesar de una oxigenación y ventilación adecuadas, la frecuencia cardíaca es < 60 Ipm en un lactante o niño con signos de una perfusión tisular deficiente, inicie la RCP.
 

Dato fundamental

Evaluación del ritmo y de la frecuencia cardíaca

Tenga en cuenta lo siguiente al evaluar el ritmo y la frecuencia cardíaca en un niño con enfermedades ó lesiones graves  :

  • El ritmo inicial y la frecuencia cardíaca usual del niño.

  • El estado clínico y el nivel de actividad del niño (incluida la función cardíaca inicial)

Los niños con cardiopatía congénita podrían padecer anomalías de conducción subyacentes.

Interprete el ritmo y la frecuencia cardíaca del niño comparándolos con su ritmo y frecuencia cardíaca iniciales.

Los niños con mala función cardíaca son más propensos a arritmias sintomáticas que los que tienen buena función cardíaca.

 



La
hipoxia tisular es la principal causa de bradicardia sintomática en niños. Por tanto, la bradicardia sintomática en niños suele ser el resultado de (y no la razón de) insuficiencia respiratoria e hipoxemia progresivas. Las prioridades en el manejo y la evaluación iniciales deben ser mantener la vía aérea y ofrecer ventilación y oxigenación adecuadas.
 

La bradicardia puede clasificarse como :

La bradicardia primaria es resultado de una afección cardíaca adquirida o congénita que ralentiza la frecuencia de despolarización espontánea de las células del marcapasos normal del corazón ó la conducción lenta por el sistema de conducción del corazón.

 

Las causas de la bradicardia primaria incluyen :

La bradicardia secundaria es el resultado de afecciones que alteran la función normal del corazón (es decir, ralentizan la conducción o los nódulos sinoauriculares por la unión auriculoventricular [AV]) .

 

Las causas de la bradicardia secundaria incluyen :

 

Reconocimiento de la bradicardia 

 

Signos y síntomas de la bradicardia


El gasto cardíaco (volumen de sangre que el corazón bombea por minuto) es igual al volumen sistólico (volumen de sangre bombeada con cada latido) multiplicado por la frecuencia cardíaca (número de latidos por minuto).

Gasto cardíaco = Volumen sistólico x Frecuencia cardíaca

Cuando
la frecuencia cardíaca disminuye, el gasto cardíaco solo se puede mantener si se aumenta el volumen sistólico. Ya que la capacidad del corazón para aumentar el volumen sistólico es limitada (especialmente en los lactantes), el gasto cardíaco normalmente se reduce con la bradicardia.

 

Una frecuencia cardíaca extremadamente lenta ocasiona un gasto cardíaco muy bajo que puede amenazar la vida y propiciar una compromiso cardiopulmonar.

 

Los signos de compromiso cardiopulmonar asociada a la bradicardia son :

 

Características del ECG de la bradicardia


Las características del ECG de la bradicardia incluyen : 
 

 

Frecuencia cardíaca

Frecuencia cardíaca lenta en comparación con frecuencia normal de la edad

Ondas P

Podrían ó no estar visibles

Complejo QRS

Estrecho ó ancho (según el origen del marcapasos ó lugar de lesión del sistema de conducción)

Onda P y complejo QRS 

Podrían no estar relacionados (es decir, disociación AV)


 
Consulte "Repaso del reconocimiento del ritmo" del Apéndice para obtener ejemplos.
 


Tipos de bradiarritmias


La bradicardia asociada a una alteración del ritmo (arritmia) se denomina bradiarritmia. Dos tipos de bradiarritmias comunes en niños son :

Estas se describen con mayor detalle en la siguiente sección. Otros tipos de bradiarritmias son paro del nodo sinusal con ritmos de escape ventricular, auricular o de la unión. Son ritmos más complejos y no se tratan en el curso del proveedor de SVAP/PALS.

 

Bradicardia sinusal


La bradicardia sinusal es una frecuencia de descarga en el nodo sinusal más lenta de lo normal para la edad del niño (consulte el Apartado 2, Tabla 2: Frecuencia cardíaca normal (latidos por minuto) por edad). La bradicardia sinusal no es necesariamente problemática. Suele presentarse en niños sanos en reposo cuando los requerimientos metabólicos del cuerpo son relativamente lentos (por ejemplo, durante el sueño).

 

Los deportistas con buenas condiciones físicas suelen presentar bradicardia sinusal porque tienen un volumen sistólico alto y un mayor tono vagal. Sin embargo, la bradicardia sinusal también se puede desarrollar como respuesta a la hipoxia, la hipotensión y la acidosis. Como se ha explicado anteriormente, suele ser el resultado de una insuficiencia respiratoria progresiva y puede ser un indicio de paro cardíaco inminente. La bradicardia sinusal también puede deberse a efectos de fármacos. Por tanto, la evaluación de la bradicardia sinusal siempre debe incluir la evaluación del estado clínico del niño.

En raras ocasiones, los niños con bradicardia primaria padecen un trastorno intrínseco del nodo sinusal que afecta a su capacidad para despolarizar de manera eficaz. Estos niños suelen presentar antecedentes de cirugía por cardiopatía congénita compleja. Otras causas de trastornos del nodo sinusal incluyen anomalías congénitas del sistema de conducción, miocardiopatías y miocarditis.

Bloqueo AV


Un bloqueo AV es una alteración de la conducción eléctrica a través del nodo AV.        El bloqueo AV se clasifica de la siguiente manera :

 

 

 

 

Manejo: algoritmo de bradicardia pediátrica con pulso y mala perfusión

El algoritmo de bradicardia pediátrica (Figura 2) presenta los pasos para la evaluación y el tratamiento de niños con bradicardia sintomática (bradicardia con pulso y mala perfusión), Consulte el cuadro Concepto crítico de la sección "Definiciones" anterior para obtener más información sobre la bradicardia sintomática y la compromiso cardiopulmonar. En el siguiente texto, los números de los cuadros hacen referencia a los cuadros correspondientes en este algoritmo.

Figura 2. Algoritmo de bradicardia pediátrica con pulso y mala perfusión.



 

 

Identificar y tratar la causa subyacente  (Cuadro 1)

 

Cuando identifique la bradicardia sintomática con compromiso cardiopulmonar , el manejo  inicial puede incluir lo siguiente, aunque las prioridades son la oxigenación y ventilación inmediatas :  



 

 

La evaluación de un cardiólogo pediátrico puede ser beneficiosa para un niño con bradicardia primaria. Sin embargo , ante la presencia de síntomas , no retrase el tratamiento de urgencia , incluída la RCP de calidad.

 

 

Concepto crítico


Reevalúe para comprobar si hay compromiso cardiopulmonar
 

 Reevalúe al niño para descartar signos de compromiso cardiopulmonar, como :

  • Hipotensión

  • Alteración importante del estado de consciencia

  • Signos de mala perfusión



Reevaluar (Cuadro 2)


Reevalúe para determinar si la bradicardia y el compromiso cardiopulmonar continúan a pesar de la ventilación y oxigenación adecuadas.



 

 


Si la respiración y perfusión son adecuadas (Cuadro 4a)


Si los pulsos, la perfusión y las respiraciones son adecuados, no se necesita tratamiento de urgencia. Monitorice y continúe la evaluación.
 

 

Dato fundamental

Realice RCP de calidad

Durante la RCP, comprima rápido (100 compresiones por minuto como mínimo); comprima fuerte (al menos un tercio del diámetro anteroposterior del tórax); permita la descompresión torácica completa tras cada compresión; minimice las interrupciones entre cada compresión; evite ventilar en exceso.


 

Si la bradicardia y la compromiso cardiopulmonar persisten: realizar la RCP (Cuadro 3)

Si la bradicardia está asociada a compromiso cardiopulmonar (cuadro Concepto crítico) y si la frecuencia cardíaca es < 60 Ipm a pesar de una oxigenación y ventilación efectivas, inicie las compresiones torácicas y ventilaciones (RCP). Si la bradicardia persiste, inicie el tratamiento con fármacos y una posible electroestimulaciór (Cuadro 5). Reevalúe al niño frecuentemente para confirmar la respuesta al tratamiento.

Revaluar el ritmo (Cuadro 4)


Reevalúe para determinar si la bradicardia y compromiso cardiopulmonar continúan a pesar de ofrecer oxigenación, ventilación y RCP.
 




Administrar medicación (Cuadro 5)


Si la bradicardia y la compromiso cardiopulmonar continúan a pesar de la oxigenación, ventilación y RCP, administre adrenalina.

Considere administrar atropina.

Adrenalina


La adrenalina está indicada para bradicardia sintomática que persiste a pesar de una ventilación y oxigenación efectivas.  La adrenalina tiene actividad alfa y beta adrenérgica. La actividad beta adrenérgica aumenta la frecuencia y el gasto cardíaco y la alfa adrenérgica causa vasoconstricción.

La acción de la adrenalina y otras catecolaminas se puede reducir por acidosis e hipoxia. Por tanto, el mantenimiento de la vía aérea, ventilación, oxigenación y perfusión (con compresiones torácicas) es esencial.

 

 



 

Para la bradicardia persistente, considere una infusión continua de adrenalina  (0,1 a 0,3 mcg/kg por minuto).  Una infusión continua de adrenalina podría servir, sobre todo, si el niño ha respondido a un bolo de adrenalina. Dosifique la infusión según la respuesta clínica.
 


Atropina


El sulfato de atropina es un fármaco parasimpaticolítico (ó anticolinérgico) que acelera los marcapasos sinusales o auriculares y facilita la conducción AV. Administre atropina en vez de adrenalina para la bradicardia causada por un aumento del tono vagal, una reacción adversa a fármacos clorinérgicos (por ejemplo, organofosforados), o un bloqueo AV completo.

 

La atropina (y la electroestimulación)  son preferibles a la adrenalina como la primera opción de tratamiento del bloqueo AV sintomático debido a una bradicardia primaria.

 

Los fundamentos para el uso de la atropina en vez de adrenalina en estas situaciones se basan en que la adrenalina puede causar arritmias ventriculares si el miocardio tiene una anomalía crónica o hipóxica/isquémica. Si el niño no responde a la atropina en estas situaciones, entonces deberá usar adrenalina. La atropina no está indicada para el bloqueo AV causado por bradicardia secundaria (esto es, causas tratables como hipoxia o acidosis).
 

La atropina puede usarse para el tratamiento de un bloqueo AV de segundo grado (tipos I y II de Mobitz) y un bloqueo AV de tercer grado. El profesional de la salud debe reconocer, sin embargo, que el bloqueo AV sintomático puede no responder a la atropina y que el niño puede necesitar una electroestimulación.

La atropina o los fármacos similares a la atropina se utilizan a menudo de forma profiláctica en los niños más pequeños para evitar la bradicardia de causa vagal durante los intentos de intubación endotraqueal.




Tenga en cuenta que las dosis pequeñas de atropina pueden producir bradicardia paradójica; por este
motivo, se recomienda una dosis mínima de 0,1 mg.   Después de la administración de atropina, se puede producir taquicardia, pero el paciente pediátrico tolera normalmente bien la taquicardia inducida por la atropina.

Considerar la electroestimulación cardíaca (Cuadro 5)


La electroestimulación cardíaca temporal puede salvar la vida en algunos casos de bradicardia causada por un bloqueo AV completo o por una función anormal del nodo sinusal. Por ejemplo, la electroestimulación está indicada para el bloqueo AV después de una corrección quirúrgica de cardiopatía congénita.
 


Tratar las causas subyacentes (Cuadro 5)


Identifique y trate las causas potencialmente reversibles y las circunstancias especiales que puedan causar la bradicardia.

 

Las dos causas potencialmente reversibles más comunes de bradicardia son la hipoxia y el incremento del tono vagal. Tenga en cuenta que después de un trasplante cardíaco, las fibras de los nervios simpáticos no están conectadas al corazón, por lo que la respuesta a los fármacos simpaticomiméticos puede ser impredecible. Por este mismo motivo, los fármacos anticolinérgicos como la atropina pueden resultar ineficaces. En estos pacientes, puede estar indicado el uso temprano de la electroestimulación cardíaca.
 

Trate las causas potencialmente reversibles de bradicardia de la forma siguiente  :





Paro cardiorrespiratorio (Cuadro 6)


Si se desarrolla un paro cardiorrespiratorio, inicie la RCP.    Actúe según el algoritmo de paro cardíaco pediátrico (consulte el Apartado 10: "Reconocimiento y manejo del paro cardíaco").