Neonatal Life Support
Octubre - 2020
Soporte vital neonatal
Hay más de 4 millones de nacimientos cada año en los Estados Unidos y Canadá. Hasta 1 de cada 10 recién nacidos necesitará ayuda para la transición desde el ambiente líquido del útero a una sala llena de aire. Es esencial que cada recién nacido cuente con un cuidador que esté preparado y equipado para esa función y dedicado a facilitar esa transición. Además, una proporción importante de recién nacidos que necesitan una transición facilitada corre el riesgo de padecer complicaciones que requieran personal capacitado adicional. Todo el entorno perinatal debe estar listo para esta situación. El proceso de facilitar la transición se describe en el Algoritmo de reanimación neonatal que comienza con las necesidades de cada recién nacido y continúa con los pasos que cubren las necesidades de los recién nacidos en riesgo.
En las Guías del 2020, ofrecemos recomendaciones sobre cómo seguir el algoritmo, incluidas la anticipación y la preparación, el manejo del cordón umbilical en el parto, las acciones iniciales, el monitoreo de la frecuencia cardíaca, el soporte ventilatorio, las compresiones torácicas, el acceso y los tratamientos intravasculares, cuándo no comenzar la reanimación y cuándo detenerla, la atención después de la reanimación y los factores humanos y el desempeño. Aquí, destacamos recomendaciones nuevas y actualizadas que consideramos que tendrán un impacto significativo en los resultados de los paros cardíacos.
Resumen de los aspectos clave y los principales cambios realizados
La reanimación para recién nacidos requiere anticipación y preparación por parte de proveedores que se entrenan individualmente y como equipos.
La mayoría de los recién nacidos no requiere pinzamiento del cordón inmediato o reanimación y se puede evaluar y controlar durante el contacto piel a piel con sus madres después del nacimiento.
La prevención de la hipotermia es un punto importante para la reanimación neonatal. La importancia del contacto piel a piel en los recién nacidos sanos está reforzada como un medio para promover la vinculación parental, el amamantamiento y la normotermia.
La insuflación y la ventilación de los pulmones son la prioridad en los recién nacidos que necesitan soporte después del nacimiento.
Un aumento en la frecuencia cardíaca es el indicador más importante de la ventilación efectiva y la respuesta a intervenciones de reanimación.
La pulsioximetría se utiliza para guiar la terapia con oxígeno y cumplir los objetivos de saturación de oxígeno.
No se recomienda la aspiración endotraqueal de rutina para lactantes vigorosos o no que nacen con liquido amniótico teñido con meconio (LATM).
La aspiración endotraqueal se indica solo si se sospecha una obstrucción de la vía aérea después de proporcionar ventilación con presión positiva (VPP).
Las compresiones torácicas se proporcionan si hay una respuesta deficiente de la frecuencia cardíaca a la ventilación después de los pasos correctivos de ventilación, que preferentemente incluyen la intubación endotraqueal.
La respuesta de la frecuencia cardíaca a las compresiones torácicas y los medicamentos se debe controlar electrocardiógráficamente.
Cuando se requiere acceso vascular en recién nacidos, se prefiere la vía venosa umbilical.
Cuando el acceso IV no es factible, se puede considerar el acceso IO.
Si la respuesta a las compresiones torácicas es deficiente, puede ser razonable proporcionar adrenalina, preferentemente a través de la vía intravascular.
Los recién nacidos que no responden a la adrenalina y que tienen antecedentes o exámenes coherentes con la pérdida de sangre pueden requerir una expansión del volumen.
Si todos estos pasos de reanimación se realizan eficazmente y no hay una respuesta de frecuencia cardíaca en 20 minutos, se debe analizar la redirección de la atención con el equipo y la familia.
Principales recomendaciones nuevas y actualizadas
I.- Anticipación a la necesidad de reanimación
2020 (nuevo) :
A cada nacimiento debe asistir al menos una persona que pueda realizar los pasos iniciales de la reanimación para recién nacidos e iniciar una VPP y cuya única responsabilidad sea el cuidado del recién nacido.
Por qué :
A fin de apoyar una transición sin problemas y segura para los recién nacidos, de estar en el útero a respirar aire, en cada nacimiento debe haber al menos una persona cuya principal responsabilidad sea el recién nacido y que esté entrenada y equipada para comenzar la VPP sin demora.
Los estudios de observación y mejora de la calidad indican que este enfoque permite identificar recién nacidos en riesgo, promueve el uso de listas de verificación para preparar el equipamiento y facilita la comprobación del equipo.
Una revisión sistemática del entrenamiento en reanimación neonatal en entornos con bajos recursos mostró una reducción de la mortinatalidad y la mortalidad a los 7 días.
II.- Manejo de la temperatura en los recién nacidos
2020 (nuevo):
La colocación piel a piel con la madre de los recién nacidos sanos que no requieren reanimación después del nacimiento puede ser eficaz para mejorar la lactancia, el control de temperatura y la estabilidad de la glucemia.
Por qué :
Datos de una revisión sistemática Cochrane mostraron que el contacto temprano piel a piel promueve la normotermia en recién nacidos saludables.
Además, 2 metaanálisis de ECA y estudios observacionales de contacto prolongado piel a piel después de la reanimación inicial o la estabilización demostraron una menor mortalidad, una mejor lactancia, una menor duración de la hospitalización y un mayor aumento de peso en los bebés prematuros y con poco peso al nacer.
III.- Despeje de la vía aérea cuando hay meconio
2020 (actualizado) :
En el caso de los recién nacidos no vigorosos (que presentan apnea o un esfuerzo ventilatorio ineficaz) que nacen con LATM, no se recomienda realizar una laringoscopia de rutina con o sin aspiración traqueal.
2020 (actualizado) :
En el caso de los recién nacidos no vigorosos que nacen con LATM y que presentan indicios de obstrucción de vía aérea durante la VPP, puede ser beneficioso realizar la intubación y la aspiración traqueal.
2015 (antiguo) :
Cuando hay meconio, ya no se aconseja la intubación de rutina para la aspiración traqueal porque no hay suficientes datos que indiquen que deba seguir recomendándose esta práctica.
Por qué :
En recién nacidos con LATM que no son vigorosos se pueden proporcionar pasos iniciales y VPP.
La aspiración endotraqueal se indica solo si se sospecha obstrucción de vía aérea después de proporcionar VPP.
Los datos de los ECA sugieren que los recién nacidos no vigorosos que nacen con LATM tienen los mismos resultados (supervivencia, necesidad de soporte ventilatorio), independientemente de que sean aspirados antes o después del inicio de la VPP.
La laringoscopia directa y la aspiración endotraqueal no son prácticas de rutina para los lactantes que nacen con LATM, pero pueden ser beneficiosos para los recién nacidos que presentan obstrucción de la vía aérea mientras reciben VPP.
IV.- Acceso vascular
2020 (nuevo) :
Para los lactantes que requieren acceso vascular en el momento del parto, la vena umbilical es la vía recomendada.
Si no es factible acceder por vía intravenosa, puede ser razonable utilizar la vía IO.
Por qué :
Los recién nacidos que no han respondido a las compresiones torácicas y la VPP necesitan acceso vascular para que se les infunda adrenalina o expansores de volumen.
El cateterismo venoso umbilical es la técnica preferida en la sala de parto.
El acceso IO es una alternativa si no es factible tener acceso a la vena umbilical o si se está atendiendo fuera de la sala de parto.
Varios reportes de caso han descrito complicaciones locales asociadas a la colocación de la aguja IO.
V.- Finalización de la reanimación
2020 (actualizado):
En los recién nacidos que reciben reanimación, si no hay frecuencia cardíaca y se han realizado todos los pasos de reanimación, se debe analizar con el equipo de atención de salud y con la familia el cese de los esfuerzos de reanimación.
Un plazo razonable para este cambio en los objetivos de atención es de aproximadamente 20 minutos después del nacimiento.
2010 (antiguo) :
En un recién nacido sin frecuencia cardíaca detectable, es conveniente considerar la posibilidad de detener la reanimación si la frecuencia cardíaca permanece indetectable durante 10 minutos.
Por qué :
Los recién nacidos que no han respondido a los esfuerzos de reanimación antes de los 20 minutos de vida tienen una probabilidad baja de supervivencia.
Por esta razón, se sugiere un plazo para tomar decisiones sobre la interrupción de los esfuerzos de reanimación, con énfasis en la participación de los padres y el equipo de reanimación antes de volver a dar indicaciones de atención.
VI.- Desempeño humano y del sistema
2020 (actualizado) :
Para los participantes que han sido entrenados en reanimación neonatal, el entrenamiento individual o de refuerzo del equipo debe realizarse con mayor frecuencia que cada 2 años para favorecer la retención de conocimientos, habilidades y comportamientos.
2015 (antiguo) :
Los estudios que investigaron con qué frecuencia los profesionales de la salud o los estudiantes de atención de la salud deben entrenarse no mostraron diferencias en los resultados de los pacientes, pero sí pudieron mostrar algunas ventajas en el rendimiento psicomotor, el conocimiento y la confianza cuando se realizó un entrenamiento enfocado cada 6 meses o con mayor frecuencia.
Se aconseja que el entrenamiento en tareas de reanimación neonatal se realice con más frecuencia que cada 2 años, como ocurre actualmente.
Por qué :
Los estudios educativos sugieren que el conocimiento y las habilidades de reanimación cardiopulmonar disminuyen en un plazo de 3 a 12 meses después del entrenamiento.
Se ha demostrado que un entrenamiento de refuerzo frecuente y breve mejora el rendimiento en estudios de simulación y reduce la mortalidad neonatal en entornos de bajos recursos.
Para anticiparse a las situaciones y prepararse de manera eficaz, los profesionales y los equipos pueden mejorar su rendimiento con la práctica frecuente.